Gilneo

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Worgen Protection Warrior

GILNEO DE PUERTO QUILLA

Gilneo nació en Puerto Quilla, fruto del amor que surgió entre dos jóvenes, durante los convulsos años que precedieron a la rebelión. Su madre, de nombre Águeda, era una sirvienta que trabajaba en la Mansión de Cringris, cuando se enamoró de un joven idealista y pescador de oficio, de nombre Darneo. Sin embargo, al igual que la tragedia se apodero del reino, lo hizo también de aquella joven pareja.

Águeda murió en circunstancias misteriosas, como muchos otros en aquella época. Los indicios apuntaban a que había sido atacada por una bestia durante la noche, mientras regresaba de la mansión a Puerto Quilla. Gilneo era muy joven cuando encontraron los restos del cuerpo de su madre. Y aunque Darneo trato de criarlo, la adicción al juego y al alcohol que había adquirido tras la muerte de su amada esposa, le terminaron buscando la ruina. Viendo a su padre corrompido por las miserables debilidades y con la muerte de su madre siempre en el recuerdo, quería contribuir al restablecimiento del orden en el reino, con la intención de evitar que se repitieran este tipo de tragedias. Por esta razón, Gilneo se alisto al ejercito, tan pronto como la edad se lo permitió.

La relación con su padre nunca había sido sencilla, debido a que el bueno de corazón, pero débil Darneo, pasaba las noches en la timba del muelle, gastando en alcohol y apuestas, las pocas monedas que obtenía del contrabando y la pesca ilegal. A altas horas de la madrugada, aparecía en casa inconsciente y de una sola pieza, gracias a que uno de los guardias portuarios, su "amigo" de toda la vida y socio en los turbios negocios, lo traía hasta la puerta. De modo que Gilneo tuvo que aprender a buscarse la vida por su propia cuenta, desde muy temprana edad. Y termino haciendo estrecha relación, con el ultimo oficial honrado que quedaba en Puerto Quilla. Un veterano llamado Greywell, al que todos llamaban "el viejo sabueso" y con quien colaboraba siempre que podía, en la investigación de los misteriosos asesinatos que acontecían en las oscuras noches de Gilneas.

No era exagerado afirmar que el viejo, aunque inagotable oficial, había sido lo mas parecido a un padre que Gilneo tuvo durante su adolescencia. Quien a su vez, habiendo perdido esposa e hija a causa de los misteriosos crímenes, consideraba a Gilneo como su propio hijo y termino recomendándolo para que lo aceptaran en la academia de oficiales del ejercito.

Cuando Gilneo marcho al cuartel, donde viviría los próximos años, sin apenas mantener correspondencia con su padre, Darneo se sintió abandonado por su hijo y sufría la persecución de aquellos a los que debía dinero. Debido a que el reino había cerrado sus fronteras años atrás y que los pescadores apenas podían faenar en las aguas cercanas, la pobreza termino cayendo sobre muchos de los habitantes de Puerto Quilla. Desesperado por conseguir dinero y cansado de que los cobradores de deudas le hicieran la vida imposible, mas que no desistía en su enemistad con la monarquía, Darneo decidió huir con su socio, para unirse a la tripulación de los Piratas Fuertemarea, quienes se habían quedado encerrados en Gilneas y planeaban su huida. Desde ese día, Gilneo, nunca mas volvió a saber nada de su padre.

UN HOMBRE DEL REY

Su situación personal, no hizo mas que reafirmarlo en sus convicciones. Gilneas debía ser salvada y para ello era necesario que se restableciera el orden. Esto lo condujo a destacar en el ejercito y llegar a ser aquello que su padre siempre había criticado, un ferviente defensor del Rey. Sin embargo, la maldición de los huargen termino por descontrolarse del todo y los gilneanos tuvieron que dejar a un lado sus diferencias, para afrontar la invasión de los Renegados.

De sobras es conocido el drama que condujo a los gilneanos hasta Darnassus. Gilneo participo en la batalla por Gilneas y ayudo en la evacuación de todos aquellos que pudieran ser salvados. Siendo su lugar de nacimiento, el ultimo reducto de resistencia, frente al avance de los Renegados. El lugar del que partieron los navíos que los elfos habían traído para rescatarlos. El ultimo lugar que vio mientras se alejaba hacia el mare magnum. Durante aquellos acontecimientos, al igual que muchos otros gilneanos, sufrió en sus propias carnes la maldición de los huargen y se convirtió en parte de algo mas...

Desde entonces, sirvió en su propósito a la guardia gris y lucho en nombre de la Alianza y Azeroth en incontables ocasiones. Pero durante todo ese tiempo, mantuvo la esperanza de recuperar su reino y su ciudad. Y este sueño se hizo realidad, cuando tras muchos años, los gilneanos y las fuerzas combinadas de la Alianza y la Horda, lograron recuperar el reino, del cual, tras desaparecer la "nueva peste", se estaban apoderando los fanáticos de la Cruzada Escarlata.

** TODO HA SIDO POR TI**

En la actualidad, reside en la ciudad de Gilneas, en una zona céntrica, donde adquirió una casa de gran valor. Es considerado uno de los "nuevos nobles" del reino, aunque no le gusta esa expresión. Como reconocido héroe de guerra y patriota gilneano, disfruto de unas cortas vacaciones y contribuyo con una gran suma de oro en la reconstrucción de la ciudad. Paso un tiempo pescando con su caña en las cercanías de Puerto Quilla y disfrutando de la merecida tranquilidad. Y por supuesto, al fin pudo reconciliarse con su pasado, visitando la tumba de su madre y llorando sobre la misma, mientras rezaba en voz baja. - Lo hemos conseguido mama, ya no hay mas muertes como la tuya. Todo ha sido por ti.

** ADALID DE AZEROTH**

Pese a la paz lograda en su interior, al ver que Gilneas tenia un futuro, la inquietud causada por los males que amenazan este mundo y ha sus habitantes, han hecho que recientemente se reincorporara a la inagotable lucha por Azeroth.